Querida hermana mayor
Querida hermana,
tú que tanto nos has enseñado
de valor y de valores
y que te has empeñado
en ser roca
cuando solo eras viento
deseando que alguien te abrazara.
Tú, hembra mayor
que has cargado con nuestros
cuerpos niños
y que siempre has dicho la verdad
mientras que nosotros,
salvajes infantes,
mentíamos como bellacos.
Tú, que has luchado sola,
tantas y tantas veces
contra los molinos de sal.
Querida hermana,
tú que has sido capaz
de crear amaneceres para todos
mientras a ti te robaban el sol
que jurabas era tuyo
y, con las fuerzas inventadas,
buscabas agua
para nuestros castillos de arena.
Querida hermana mayor,
que has deseado ser pequeña
pero que nunca te hemos dejado…
Ojalá mis versos
te acompañen siempre,
ojalá lo haga yo
mientras tú me dejes.
Yolanda Sáenz de tejada
(De mi libro “Diario de una mujer completa”)