El infierno Vasco. De Iñaki Arteta

  «Es el infierno de los que se fueron y lo pueden contar, es el infierno de los que no se han ido optando por posturas silentes, no beligerantes, es el infierno de los que se han quedado para defender la libertad a contracorriente.»

  El País Vasco, una de las regiones más ricas de Europa con tan sólo dos millones de habitantes, es considerado, por los que lo visitan, un pequeño paraíso.

  Pero tras el clima templado, los hermosos paisajes y su elevado nivel de vida, esconde una terrible realidad: desde hace treinta años, más de doscientos mil de sus ciudadanos han tenido que exiliarse para salvar su vida, escapar de la extorsión, del aislamiento social o de las imposiciones nacionalistas.

  Estreno el 7 de noviembre en los siguientes cines: Madrid (Cine Paz), Barcelona (Cine Alexandra, Bilbao (Multicines), Vitoria (Cine Florida), Valladolid (Cine Casablanca), Albacete (Cine Candilejas), Gerona (Cine Albéniz), Santander (Cine Los Ángeles) y Pamplona (Olite).

 

3 comentarios:

  1. Acostumbrado a denunciar públicamente las terribles injusticias que se comenten en todo el mundo contra quien no piensa acorde al régimen establecido, mi compromiso social se extiende a mis hermanos del País Vasco que tienen que huir de la intolerancia, esconderse de los odios y rencores, y llorar lágrimas silenciosas de impotencia por no poder alzar sus voces.
    Lo más lamentable de todo, es que parece no importarle a casi nadie, cegados todos por las cortinas de humo de los de siempre.
    Mi aliento para todos ellos.
    Enhorabuena por este trabajo.

  2. No comprendo como algo así puede ocurrir en una región de España sin que se haga nada efectivo. Y aún más me sorprende que se derroche solidaridad con otros extremos lejanos del mundo y se olvide a estas personas.

    Enhorabuena a los que lanzan el grito de impotencia. Estoy de acuerdo contigo Isidro.
    Saludos

  3. Desde luego, no creo que podamos imaginar lo que pueden estar sufriendo algunas personas que han tenido que abandonar su tierra o se sienten amenazadas. No me parece justo que esto forme parte de lo cotidiano hasta el punto de no reflexionar sobre ello de forma profunda y exigente.

    Enhorabuena por el escrito.

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