El micrófono.
Hace pocos días, mientras esperaba un micrófono para expresar mi opinión en un encuentro, y tras pedir la palabra en dos conferencias distintas sin haberlo conseguido, escuche a mi espalda: “El que tiene el micrófono, tiene el poder”.
Cuando volví la cabeza sonriendo, pensando quien sería el otro asistente que al fin lo había atrapado, me sorprendió ver que el portador del micrófono y el autor de la frase era el anfitrión y eso ya no me hizo tanta gracia.
Apenas quedaba tiempo y acepté que probablemente acabaría la discusión sin poder decir lo que pensaba. En ese momento creo que comprendí lo que debió sentir Francisco Umbral frente a Mercedes Milá en la famosa entrevista que todos conocemos. Así que opté por seguir la técnica del maestro y volví a levantar la mano por enésima vez, esta vez añadiendo la frase hecha: “Quiero hablar de mi libro”. Creo que los componentes de la mesa, tras dos turnos más de palabra, consideraron que no debían cerrar el tema sin darme la oportunidad y sinceramente se lo agradezco, porque probablemente de no haber podido expresar mi opinión, hubiera dado por terminada mi asistencia al encuentro.
Es una pena que buenos proyectos, terminen muchas veces perdiéndose por detalles nimios que dejan una mala impresión en la retina con esas pequeñas muestras de cicatería, siendo estas las que al final, injustamente quizá, terminan prevaleciendo en la memoria.
Si efectivamente se nos ha concedido conocimiento o algún medio a través del cual podemos hacer más cosas que los demás, ya sea un micrófono, un altavoz, una Web, un medio de comunicación, un gobierno, un juzgado o un uniforme para dirigir el tráfico, antes que nada, se tiene la responsabilidad, entre otras cosas, de ser generoso, justo, honesto, educado y agradecido.
Los medios técnicos, son solo eso, medios técnicos, recursos disponibles, inertes si no hay personas detrás que determinan para que los quieren usar y como. Y la forma de actuar de esas personas, con un micrófono o con cualquier otra cosa, determinará si el poder es suyo o del medio que usa. Solo si con ese micrófono llegas al corazón, las emociones, la conciencia, y el interés de quien te escucha, tienes un poder. Sino, solo tienes un micrófono.
Luisa Núñez
CEO del Portal Canal Literatura
Especialista Universitario en Sistemas Interactivos de Comunicación
