El cruel hechizo
No vayas a leerme, elude el atropello
de perderte en mis letras como una letra más;
esquívale a mi verbo, no lo pienses tan bello,
escapa a mi poesía demagoga y falaz…
Jamás oses creerte la dulce melodía
que con paciencia artera tarde a tarde tejí;
no sueñes ni un minuto, no tengas la osadía
de imaginar que todo lo he escrito para ti.
Porque si a eso te atreves sufrirás el hechizo
del duende alborotado y engañoso y huidizo
que con cada palabra te querrá poseer…
Y un día como tantos te verás en mi lecho
buscando vanamente… estrellas en el techo…
y verás que soy hombre… y que tú eres mujer.
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Marcelo Galliano
Pero qué bonito. Me ha encantado.