Poema de amor con lluvia
Llueve en la tarde y pienso… que hoy lloverá en tu reja
y lloverá en tus ojos tan dulces de mujer,
y así como si nada musitarás la queja
de esa tristeza suave que te legó el llover.
Y yo aquí francamente decidido a escribirte
cosas que en otra tarde jamás te escribiré,
porque la lluvia misma me provoca decirte
los versos que, cobarde, nunca me animaré.
Será el olor del viento, o el del agua en las flores,
serán las gotas blancas cayendo en el balcón,
será que con la lluvia duelen más los dolores,
será que si no escribo se inunda el corazón.
Lo cierto es que en la lluvia te imagino perdida,
con la boca empapada tan dispuesta a besar,
hoy llueve entre nosotros… qué vana que es la vida
si no nos animamos los dos a diluviar.
Y es hora, ya que llueve, que diga que te amo,
que no tolero el tiempo cuando pasa sin ti,
que si duermo y no sueño con tu amor me reclamo
y que todos tus sueños los quiero para mí.
Pero nomás la lluvia recoja su melena
crepuscular y roja con que al mundo empapó ,
a ti y a mí con suerte nos quedara la pena
y algún vago perfume del agua que murió.
Y así esta cobardía que tanto yo maldigo
te labrará un silencio, pues yo no podré hablar,
que del amor hay cosas que yo con lluvia digo
y al terminar la lluvia… yo las vuelvo a callar.
Marcelo Galliano
Argentina