Marcela, mi vecina del frente, se fue de visita a la casa de sus tíos que viven en Buenos Aires. Me saludó hoy por la tarde desde la ventanilla de un Chevrolet Impala, color anaranjado, rebosante de felicidad. Una desgracia… ¡Justo ahora se tenía que ir! ¡Con la cantidad de…
Leer más..